En cuanto al proceso que lideró el Peronismo a partir de 1945, es indiscutible que fue determinante en la sociedad y cambió la vida y las costumbres políticas, así como los valores e ideales que hasta ese momento predominaban. Tanto para los peronistas como para los integrantes de partidos opositores, ya sea radicales, comunistas o socialistas, las presidencias de Perón, en especial la primera, integraron a la única clase que hasta esa época estaba relegada en cuanto a la opinión política, y marcó las pautas que debían seguirse para llegar a una nación independiente, soberana y justa. Esta transición es, indudablemente, la mas importante del siglo XX, sino lo es de toda la historia Argentina, y está claro que ninguna persona puede desconocer el destacado rol de Perón, Evita y su gobierno tuvieron, esté a favor o en contra del Justicialismo.
Sin embargo, muchas personas tratan de desprestigiar la figura del Coronel mediante otros recursos, entre los cuales el más utilizado ha sido la acusación de ideologías nazi-fascistas. Es seguro que el gobierno de Perón, como absolutamente todos los demás que ha habido en la Argentina y en el mundo, tuvo errores graves y algunos aciertos importantes. Pero creo que es de una total ignorancia y necedad tildarlo de este modo. En primer lugar, es necesario aclarar que Perón, por el solo hecho de pertenecer al Ejército, traía consigo una formación muy influenciada por ideologías fascistas de derecha, lo que estaba agravado por el contexto internacional del momento, en el cual se vivían grandes confusiones ideológicas, y en el cual el nazismo y el fascismo se encontraban en auge. Esto se debía a que, hasta ese momento, no se conocían los terribles crímenes efectuados por el Estado Alemán, el cual gozaba de gran prestigio entre las Fuerzas Militares de todo el mundo, puesto que gracias al ascenso al poder de Hitler, Alemania había podido despegar de la profunda crisis económica, social y política que devino luego de la I Guerra Mundial. Perón había sido agregado militar en Italia, e incluso llegó a conocer a Benito Mussolini. Años después también sería una figura de gran importancia dentro de una logia militar, llamada GOU, que tenía una tendencia pro nazi-fascista, y el cual luego realizaría un golpe de estado en 1943, derrocando al presidente Castillo. Debido a estos antecedentes, nadie puede afirmar que Perón tenia una ideología socialista, y es muy factible que se asegure que sus ideologías tenían procedencias fascistas. Sin embargo, muchas veces se cae en el error de afirmar que su formación ideológica fue predominante durante sus presidencias. Se sabe que definitivamente ningún gobierno de Perón instituyó los campos de concentración, la represión militar o policial, o asesinatos en masa. No hay documentos ni testimonios que lo avalen, y quien así lo afirma carece de fundamentos. Es verdad que hubo una leve persecución a los opositores y que se cometieron algunos asesinatos políticos individuales. Pero, ¿acaso fue Perón el que inició estas persecuciones en la Argentina?¿Nunca ningún otro gobierno persiguió e incluso masacro a opositores? Esta tendencia de persecución política fue inaugurada en el país mucho antes de la llegada del peronismo al poder. Algunos de los personajes políticos en cuyos gobiernos se efectuaron crímenes políticos, que podemos citar son Rosas, en las épocas de la confrontación de la Confederación y Buenos Aires; Roca, quien en su afán por eliminar a las razas consideradas inferiores que poblaban el territorio, impulso la conquista del desierto que terminó con poblaciones enteras de aborígenes; o Yrigoyen, cuyo gobierno incursionó en la represión militar en hechos como la Semana Trágica o la Patagonia Trágica, que se desencadenaron a partir de protestas sindicales. Además de la tolerancia política que, en gran medida, tuvo el peronismo, este gobierno nunca promovió el racismo, sino que en muchos casos instigó a las minorías étnicas a la participación en la vida política y en los cargos de gobierno. El peronismo aceptó e incluso recibió con brazos abiertos la diversidad racial. Esto se demostró, por ejemplo, en el hecho de que “la Argentina peronista fue uno de los primeros países que reconoció el Estado de Israel”
[1]. También incluyó a la OIA (Organización Israelita Argentina) como uno de sus principales colaboradores, e integrantes de la comunidad judía, entre otras, como Abraham Krislavin ocuparon puestos importantes en el campo sindical y diplomático.
Por otro lado, tanto el nazismo y el fascismo se basaron en el apoyo y trataron de favorecer siempre a las clases más altas y a los sectores oligárquicos. En cambio, el movimiento peronista, ante todo dio prioridad a la integración de las clases obreras y trabajadoras más bajas. Ya desde su puesto de Secretario de Trabajo y Previsión, durante el gobierno de Farell en 1944, Perón había intentado equilibrar las fuerzas e intervenir entre los empresarios y empleadores, y los obreros. Siempre trató de favorecer a las clases bajas, a partir de medidas como las vacaciones pagas, la instauración de la jubilación, de la obra social obligatoria, y del aumento de los salarios. Fueron los partidos de tradición liberal y, un sector de radicalismo los que, en la Argentina, se basaron en el apoyo de las clases oligárquicas. Desde este punto de vista, Perón siempre apuntó a la justicia social, por lo cual siempre fue muy criticado. Una vez en el poder, Perón se apresuró a transformar las medidas que había efectuado desde la Secretaria de Trabajo y Previsión, en leyes, además de facilitar la educación gratuita, los hospitales públicos y la facilitación para la compra de viviendas a los obreros, entre otras cosas.
Un punto de vital importancia, y una diferenciación fundamental con el nazi-fascismo fue también que tanto Hitler, como Mussolinni y Franco asumieron sus cargos a partir de un golpe de estado, eludiendo el sufragio, e impusieron su figura como única depositaria del poder. También tendieron a perpetuarse en el poder, y manejar a las masas por la fuerza. Durante el gobierno peronista, especialmente en el primer periodo se destacaron dos lideres: Perón, y su esposa Eva Perón, quien fue la principal impulsora de los derechos de las mujeres y la igualdad social. En los gobiernos fascistas se trataba de dar a la mujer un papal secundario en la sociedad, y eran marginadas de las decisiones políticas. En la Argentina, Evita fue la precursora de la lucha por el voto femenino y demás derechos políticos y sociales de las mujeres. Fue muy reconocida mundialmente, y su ejemplo fue seguido en muchos países de América Latina.
Muchos grupos opositores utilizan el hecho del uso propaganda pedagógica, la comunicación gestual de Perón para alegar que el Coronel era fascista, sus continuas alusiones nacionalistas, y la idea de independencia económica y política de la nación, promoviendo un fuerte nacionalismo. En cuanto a la propaganda, todos lo partidos de todas las ideologías recurren a este recurso para divulgar sus objetivos e ideas. Es la única forma con la cual pueden dar a conocer sus planes en cuanto a la economía, la política y la sociedad. Es necesaria, debido a que la carencia de propaganda impide al partido mostrarse ante los pobladores y sus posibles votantes. Más que nada en un movimiento “joven” , emergente y con pocos años de historia, como el peronismo, la propaganda es necesaria para el conocimiento de la nueva doctrina y del nuevo partido. Por otra parte, se identificaba a los gestos que Perón hacia en sus discursos con los saludos y signos nazi-fascistas. Pero esto es una argumento demasiado pobre, debido a que, al fin y al cabo, eran solo gestos y ademanes de poca relevancia. También es muy importante destacar la remarcada política nacionalista de Perón, quien siempre trató de anteponer los intereses nacionales ante los extranjeros, lo que, de hecho, fue un gran beneficio para el país. En una época en la que el mundo se dividía en dos tendencias ideológicas muy fuertes, el comunismo de la URSS contra el capitalismo de EE.UU., Perón propuso una “Tercera posición”, por la cual se intentaba resguardar la industria nacional y crear un mercado interno independiente de los demás países, para no decaer cada vez que la economía de las potencias tambaleara. De esta manera fue que impulsó la idea de un estado interventor de la economía, planificándola en planes quinquenales. El primer plan quinquenal se basaba principalmente en el desarrollo de una industria nacional fortalecida, de la creación de un mercado interno y se proponía que no hubiera desempleo. Estas medidas nunca podrían ser tildadas de fascistas, y aun si así fuera, nadie puede negar que fueron de gran ayuda para la economía y la política argentina, que en esos momentos vivió una de sus épocas de mayor auge.
Bueno, con este post no estoy expresando mi condicion de simpatizante peronista...aclaro me considero pro socialista....pero creo que es imposible no reconocer la obra de peron y creo que, con sus altos y bajos, sus gobiernos fueron los que ams se asemejaron a las iideologias socialistas, en cuanto a las politicas sociales, la equidad economica y politica, y la integracion del "proletariado" a la politica nacional...
Salu2!!
